Por: Karla Fernández
La cuidad de Pachuca Hidalgo nueva victima de la modernidad, se construyen segundos pisos, distribuidores viales, se reparan entradas para importantes centros comerciales, se construyen nuevas autopistas y ahora sobra decir que será mucho mas moderna con el consentimiento de la construcción de la refinería aprobada para el estado, sin duda una ciudad que en el ultimo periodo de gobierno ha tenido un importante desarrollo.
¿Pero que pasa cuando miramos a nuestro alrededor y visitamos localidades de la sierra huasteca, localidades del valle del mezquital, localidades de los alrededores de esta moderna cuidad?, ¿Qué pasa cuando nos damos cuenta que en la sierra mueren mujeres embarazadas por la falta de atención medica, que los niños no van a la escuela y no por que no quieran sino simplemente por que no hay este servicio? ¿Qué la desnutrición en niños y adultos alcanza porcentajes impresionantes?
El estado de Hidalgo considerado entre uno de los 7 estados más pobres del país, en donde el 73% de sus pobladores son pobres extremos, casi indigentes y el 29% son pobres moderados. En resumen el 92% de los Hidalguenses son pobres.
Pero vivimos en una cuidad moderna, una ciudad en donde no pasa nada, aunque la población del estado se muera de hambre y pobreza en la capital se vive la modernidad en su máximo esplendor.
Los gobernantes presumen segundos pisos, la impresionante iluminación en distribuidores viales que tuvo una inversión de más de 7 millones de pesos, inauguran sus carreteras, salen en primera plana de los periódicos locales pero jamás se habla de destinar recursos para salud, para la creación de unidades médicas, para crear escuelas en poblados lejanos de la gran modernidad.
No podemos ser ajenos a lo que pasa a nuestro alrededor, no podemos fingir que no pasa nada ya que la pobreza y las formas políticas que la han acompañado desde siempre han sido un obstáculo para la construcción de ciudadanía y la generación de una sociedad más justa.
La cuidad de Pachuca Hidalgo nueva victima de la modernidad, se construyen segundos pisos, distribuidores viales, se reparan entradas para importantes centros comerciales, se construyen nuevas autopistas y ahora sobra decir que será mucho mas moderna con el consentimiento de la construcción de la refinería aprobada para el estado, sin duda una ciudad que en el ultimo periodo de gobierno ha tenido un importante desarrollo.
¿Pero que pasa cuando miramos a nuestro alrededor y visitamos localidades de la sierra huasteca, localidades del valle del mezquital, localidades de los alrededores de esta moderna cuidad?, ¿Qué pasa cuando nos damos cuenta que en la sierra mueren mujeres embarazadas por la falta de atención medica, que los niños no van a la escuela y no por que no quieran sino simplemente por que no hay este servicio? ¿Qué la desnutrición en niños y adultos alcanza porcentajes impresionantes?
El estado de Hidalgo considerado entre uno de los 7 estados más pobres del país, en donde el 73% de sus pobladores son pobres extremos, casi indigentes y el 29% son pobres moderados. En resumen el 92% de los Hidalguenses son pobres.
Pero vivimos en una cuidad moderna, una ciudad en donde no pasa nada, aunque la población del estado se muera de hambre y pobreza en la capital se vive la modernidad en su máximo esplendor.
Los gobernantes presumen segundos pisos, la impresionante iluminación en distribuidores viales que tuvo una inversión de más de 7 millones de pesos, inauguran sus carreteras, salen en primera plana de los periódicos locales pero jamás se habla de destinar recursos para salud, para la creación de unidades médicas, para crear escuelas en poblados lejanos de la gran modernidad.
No podemos ser ajenos a lo que pasa a nuestro alrededor, no podemos fingir que no pasa nada ya que la pobreza y las formas políticas que la han acompañado desde siempre han sido un obstáculo para la construcción de ciudadanía y la generación de una sociedad más justa.
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