Por. Ana Claudia Martin del Campo

Ayer en la mañana amanecí con dolor de cuerpo y de garganta, y claro lo primero que pensé fue “me voy a enfermar”, la verdad no es muy agradable sentirse enfermo, entonces me dirigí a la universidad, porque tenía que entregar mis avances de tesis, que por cierto era mi segundo examen del semestre.
Una vez que tomé el “transporte colectivo”, he de confesar sentí algo de paranoia, por mi mente pasaban ideas como: “¿y que tal que alguno de ellos tiene influenza y no sabe?”,“debí traerme un cubrebocas de la casa”, “mejor me pongo alcohol en las manos”, “y si ese tubo lo agarro alguien que tenía gripe o algo así”, lo admito ¡exageré!, pero es que en estos tiempos todos hablan de que ¡si la influenza esto! ¡que si van a suspender clases por lo del virus!, ¡qué si la hermana, amiga, o jefa de algún familiar o amigo tuvo o tiene influenza!, si lo sé estoy demasiado estresada y paranoica, lo admito.
Cuando llegue a mi casa encendí la computadora y abrí un portal de noticias; un encabezado llamó mi atención decía: “Pacta Calderón anticipo de vacunas contra influenza A H1N1”, entonces me acordé de lo que dijo Brozo en uno de sus programas del “Notifiero”: “que ya se compraron 15,000 vacunas y que esperan comprar otra cantidad similar, que llegará en el momento justo cuando el segundo brote de Influenza haya terminado”.
Hay que sentirnos bien, porque nuestro gobierno, nos va conseguir ¿cuántas dosis?, ¡a sí! aproximadamente 25 millones de dosis, de las cuales 15 se administrarán a finales de noviembre sobre todo para el personal de los centros de salud, y la segunda tanda se dará, así es en efecto, a finales de enero cuando quizá la crisis haya pasado.
Debo decir, ¡que tranquilidad siento!, al saber que a finales de enero vamos a tener suficientes vacunas, ¡a si!, suficientes vacunas para un cuarto de la población total del país, realmente me siento aliviada, y abrumada por tanta preocupación por parte nuestro eficientisimo gobierno.
En fin ya veremos que pasa con esto de la influenza, mientras tanto, en este momento iré por un poco de té de limón, abrigarme bien y hacerle compañía por un largo tiempo a mi cama…ah¡ y por cierto ya no se me olvidará llevar un cubrebocas a la escuela…desoleé.