miércoles, 14 de octubre de 2009

Un simple partido de futbol

Por. Karla Fernández

La idea de esta columna surgió un buen fin de semana, un sábado en la tarde en donde lo que más quería era descansar de una ajetreada semana, recostarme en el sillón y ver una buena película, sin embargo, no fue así, todo comenzó cuando llegue a mi casa y vi más movimiento del normal para ser un sábado de flojera, de echo me sorprendió ver mi casa llena de gente y sin saber porque, mi papá, tíos, primos, amigos de mi papá, amigos de los amigos de mi papá, en fin una gran concurrencia del sexo masculino se hacía presente.
No tarde mucho en descubrir cuál era el motivo de aquella reunión “jugaría el Pachuca contra el América”. ¿Tanto ajetreo por un simple partido de futbol?
Es sorprendente como este suceso, tan simple para muchos y tan importante para muchos otros, puede reunir amigos y familias, puede llenar un bar y dejar vacías las calles.
La pasión futbolera del mexicano es sorprendente.
Pasión por el futbol es convertir el domingo de descanso en domingo de futbol, es ahorrar para comprar un boleto del estadio para ver a tu equipo favorito aunque sea en gradas, es apoyarlo si gana, si pierde, si empata o si lo descalifican, pero es estar siempre ahí, orgulloso de portar esa camiseta, sin importar el color.
Así somos los mexicanos apasionados, futboleros. Porque aunque no seamos aficionados ni seguidores de un equipo ¿Quién no ha gritado un ¡Goooooool! a todo pulmón? ¿Quién no se ha contagiado de ese entusiasmo futbolero que todos llevamos dentro? Así somos los mexicanos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

por eso es el deporte más hermoso del mundo, porque cualquier gente lo puede jugar, si importar condicion económica, social, ideológico. Y AUNQUE SUENE A COMERCIAL DE TV AZTECA, YO AMO AL FUTBOL!